Global Investigative Journalism Network (https://archive.gijn.org/tag/vigilancia/)
A prática do jornalismo independente está enfrentando enormes desafios, que vão desde regimes autoritários que implementam leis retrógradas que reprimem as mídias a jornalistas incapazes de ganhar o suficiente para o sustento com seu trabalho. Compreender as proteções fornecidas pelo direito internacional pode beneficiar os jornalistas e ajudá-los a enfrentar esses desafios.
En 2021, un tribunal francés acusó a los ejecutivos de dos empresas de vigilancia de cargos de complicidad en torturas en Libia y Egipto, tras las revelaciones de periodistas sobre su supuesta venta de tecnología a regímenes represivos. En una serie de entrevistas, los reporteros de investigación compartieron consejos y herramientas que las salas de redacción de todo el mundo pueden usar para descubrir el spyware y los sistemas de monitoreo que sus gobiernos están comprando.
Las investigaciones periodísticas sobre la política, la corrupción y el crimen organizado en pequeñas y medianas ciudades de Brasil, México, Colombia y Honduras fueron la causa de 139 casos de asesinato de profesionales de los medios registrados por Reporteros sin Fronteras (RSF) entre 2011 y 2020. La mitad de estos periodistas había informado de que recibieron amenazas a causa su trabajo.
El Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York tiene la capacidad de rastrear a las personas en Manhattan, Brooklyn y el Bronx pasando imágenes de 15.280 cámaras de vigilancia a un software de reconocimiento facial invasivo y discriminatorio, revela una nueva investigación de Amnistía Internacional. Así es como participaron en la investigación miles de voluntarios de todo el mundo.
El investigador privado Igor Ostrovskiy le reveló al reportero de investigación estadounidense Ronan Farrow que lo estaba espiando y se convirtió en un denunciante de la amenaza de “cazar periodistas”. Ostrovskiy informó recientemente a los periodistas sobre cómo lidiar con la creciente amenaza de la vigilancia física.
Even as the attention span of readers gets shorter, Latin American media have taken the risk of producing long-form journalism for the internet and struggling to impose itself in the midst of overproduction of content more easily consumed on the internet.