En 1860, se capturó una serie de imágenes en Europa e India, casi 30 años después del invento de la fotografía. Muchas tomas fueron realizadas por fotógrafos prominentes, como Samuel Bourne y el duo Shepherd & Robertson, en monumentos y sitios conocidos. Sin embargo, en otros casos no está claro dónde, cuándo ni quién sacó esas fotografías. Este álbum, que puede verse en línea aquí, constituye una de las cientos de posesiones del museo Rijksmuseum –uno de los más grandes de los Países Bajos. El museo ha liderado un esfuerzo por digitalizar sus colecciones.
En la actualidad, las búsquedas de fuente abierta pueden ofrecer algunas pistas para identificar estas 21 imágenes cuyo autor se desconoce. Las nuevas herramientas y la riqueza de datos digitales facilitan navegar más de 150 años de paisajes, ciudades, edificios y nombres de calle cambiantes. La búsqueda por imágenes a través de Google Lens; los periódicos digitalizados; las páginas web de genealogías y subastas; la colorización por medio de inteligencia artificial y las herramientas como Peakvisor pueden ofrecer valiosa información y un mejor entendimiento de colecciones artísticas históricas.
Aquí presentamos los métodos que nos permitieron establecer la ubicación de varias de estas fotografías.
Determinando la ubicación
Las 21 fotografías parecen ser originales, pero en muchos casos puede utilizarse una búsqueda por imágenes para encontrar fotografías parecidas que ofrezcan más detalles sobre el lugar y momento en el que se tomaron.
Para utilizar la búsqueda por imágenes, la fotografía debe ser la única imagen dentro del marco.
Una búsqueda por imágenes en Yandex de esta foto nos muestra resultados recientes con fotografías del lago Königssee en los Alpes bávaros.
Compárese esta fotografía del Rijksmuseum con una imagen subida a Tripadvisor en mayo de 2018.
Otra fotografía del lado alemán de los Alpes puede conectarse a una postal antigua. A pesar de que la posición de la cámara es distinta y que hay nuevos edificios y más torres en la iglesia de la postal, la cordillera en el fondo ofrece un punto de referencia distintivo que la búsqueda por imágenes de Yandex reconoce. El buscador encontró una postal de Berchtesgaden de 1911 que se vendía en línea. Abajo, una comparación de las dos.
Puesto que ambas ubicaciones están cerca del Königssee, podemos deducir que la fotografía del lago presentada más abajo podría haberse tomado ahí.
Resulta interesante que los tres mayores buscadores por imágenes (Google Images, Yandex y Bing) no reconocieron la ubicación de inmediato. Sin embargo, al utilizar Google Lens (accesible a través del navegador) se encuentra el lugar correcto en el Konigssee.
Peakvisor, una página web y aplicación que reconoce paisajes, puede utilizarse para determinar a qué montañas pertenecen los picos en la fotografía.
Otra fotografía del álbum del Rijksmuseum muestra un pueblo en las montañas. Una búsqueda por imágenes lleva a un paisaje parecido en una fotografía en un sitio web de subastas, la cual se vendió en 2017. La página identifica al fotógrafo como Charles Soulier (1840-1875) y señala el lugar como Chamonix, Francia, al pie de la montaña francesa Mont Blanc.
Fuera de ser más grande, la fotografía subastada es parecida. Como puede verse más abajo, los edificios se corresponden entre sí y el ángulo apenas varía un poco. La principal diferencia es la cantidad de nieve visible en la montaña sobre el glaciar. El nombre de este glaciar —Gracier des bossons— también se encuentra en la descripción de la fotografía en la página web.
Con una sencilla búsqueda en Google Images podemos establecer que la página web de subastas ofrece la ubicación correcta: esta fotografía de un turista en TripAdvisor, colgada en 2013, confirma que el glaciar es el Chamonix.
El álbum del Rijksmuseum también contiene tres fotografías de una iglesia gótica: en la primera se muestra desde el otro lado un río, la segunda es la torre de la iglesia y la tercera su entrada principal.
Al buscar la primera fotografía con Yandex, Bing y Google Images no se identificaron coincidencias inmediatas. Pero Google Lens pudo ubicar varias ciudades con iglesias grandes o catedrales, aunque el templo de la fotografía se ve diferente.
Esa edificación corresponde a la iglesia más alta del mundo y sigue existiendo en Ulm, Alemania. En la actualidad, se ve diferente porque se le añadió la torre unos 30 años después de que se tomara la fotografía del álbum.
Google Images, Yandex y Bing no pudieron encontrar coincidencias para la siguiente foto del archivo del Rijksmuseum, pero Google Lens sí lo consiguió. Podemos ayudar a los algoritmos de estos tres buscadores que no pudieron identificar la fotografía si la colorizamos.
La imagen puede mejorarse utilizando una IA de colorización, disponible gratis en un sitio como Hotpot.ai. Los resultados se muestran más abajo.
Una búsqueda posterior con Yandex aporta una coincidencia clara: llevándonos a más imágenes de la ciudad de Bern en Suiza.
Pero Google Lense también sus límites. Al igual que otras herramientas de búsqueda por imágenes fue incapaz de reconocer la siguiente fotografía, incluso tras recortarla.
Esta fotografía estaba en el álbum junto con otras dos imágenes de un castillo y una iglesia tomadas en un valle. Por otro lado, estas dos imágenes sí pudieron identificarse utilizando Google Lens.
Muestran el castillo de Tarasp y la iglesia de Scuol. Ambas son ciudades en el cantón de Grisons, en el este de Suiza.
Al localizar las dos fotografías anteriores en un mapa, podemos buscar los alrededores con Google Earth para encontrar la posible ubicación de la primera imagen.
Resulta que el edificio es el Büvetta Drinking Hall, cerca de Tarasp, una estructura construida en 1870 para que los visitantes disfrutaran la famosa agua mineral de la región.
El algoritmo de reconocimiento de Google Lens ha mejorado las posibilidades de buscar por imágenes para encontrar coincidencias con fotografías antiguas. Combinándolo con otras herramientas como PeakVisor, IA de colorización y Google Earth, se ha vuelto más fácil encontrar la ubicación de tomas cuyo origen se desconoce.
Estableciendo la línea temporal
Pero ¿cuándo se tomaron estas fotografías?
Si el autor se desconoce y la fotografía no tiene la fecha escrita, las características físicas pueden ayudar a determinar el periodo.
El tamaño de las fotografías, así como el proceso químico con el que se producen, ha cambiado con el tiempo. Existen páginas como GraphicsAtlas que pueden ayudar a establecer un lapso aproximado con base en este criterio; sin embargo, como suele ser un proceso complejo es mejor dejárselo a los expertos. Estas fotos del Rijksmuseum ya se han identificado como imágenes albumen, un método de fotografía popular entre 1850 y 1900.
Pero el contenido de las fotografías puede usarse para establecer cuándo se tomaron de manera más precisa. Al buscar la fachada de la iglesia –que también es visible al otro lado de un río que encontramos por medio del buscador de Google Lense– nos llevó a una imagen del Ulm’s Art Association con la que coincide. Esta captura, tomada en 1854 y descrita como la fotografía más antigua conocida de esta iglesia, es casi idéntica en perspectiva a la imagen sin fecha del Rijksmuseum. A pesar de sus similitudes, pudo reconocerse que la foto del Rijksmuseum es más moderna, porque el edificio tiene características que aún no existían en la imagen más vieja (encerrado en rojo abajo).
Ahora que sabemos que la foto es de Ulm, podemos buscar de manera manual el archivo de la ciudad para encontrar imágenes que no hayan sido señaladas por los buscadores digitales. El periodo del archivo de Ulm es más específico que el del Rijksmuseum (1865-1875), lo cual ubicaría la fecha de la fotografía en algún punto entre 1860 y 1864.
En casos en los que el edificio no ha sufrido cambios significativos, sus alrededores pueden utilizarse para determinar cuándo se tomó. Por ejemplo, la foto izquierda presentada más abajo pertenece al álbum del Rijksmuseum y su origen puede rastrearse hasta Friburgo, en Alemania, por medio de una búsqueda por imágenes. El Rijksmuseum la ha fechado entre 1865 y 1875.
Los resultados incluyen muchas imágenes parecidas, aunque no son exactas. Una de estas – encontrada en la página web del museo de Friburgo– se le acreditó a Gottlieb Theodor Hase, un fotógrafo alemán que tomó una serie de fotografías de la histórica catedral de la ciudad. Una de las fotos de Hase puede encontrarse en artnet, donde se informa que fue subastada en 2014. La descripción de la imagen revela que la fotografía se tomó entre 1850 y 1859.
Las características de los tejados alrededor de la catedral cambian en las dos fotografías. En la de Hase pueden verse dos grandes ventanas buhardillas en una casa cerca de la plaza de la catedral. La fotografía del Rijksmuseum muestra dos ventanas más pequeñas, parecidas a las de los techos alrededor, en el mismo lugar (círculos rojos abajo).
Al buscar de nuevo el nombre de Hase llegamos a otra fotografía de la catedral de Friburgo, digitalizada también por el Rijksmuseum (aunque no pertenece al álbum mencionado de 60 imágenes). Esta fotografía, que está dañada, es muy similar a la otra del Rijksmuseum e incluye las dos grandes ventanas buhardillas (encerradas en rojo abajo), pero fue tomada desde un ángulo distinto. El Rijksmuseum ha fechado esta fotografía, también realizada por Hase, entre 1852 y 1863.
Si asumimos que los dueños de la casa no hubieran gastado en revertir estas nuevas ventanas buhardillas para devolverlas a su estado anterior, significaría que las fotografías deben haberse tomado antes. Esto nos permite inferir la secuencia en la cual se sacaron estas tres fotografías: las imágenes digitalizadas por el Rijksmuseum (la acreditada a Hase y la perteneciente a un autor desconocido) tienen que haberse tomado después de la que se muestra en la página de artnet.
Si no podemos establecer el año exacto, la ausencia o aparición de varias características en cada fotografía nos permite al menos verificar la precisión de la secuencia de los rangos de fechas que nos aportan.
Determinar el periodo cuando se tomó una fotografía por medio de este método depende de la existencia de otras imágenes capturadas alrededor de esas fechas, junto con deducciones del contexto de la fotografía. Cuanto más antiguas, más difícil es, puesto que las fotografías disponibles son menos y con menor resolución.
También pueden utilizarse dibujos o pinturas, aunque estas pueden ser menos precisas. En esos casos, otras fuentes en línea pueden utilizarse para encontrar cuándo se capturó una imagen. La siguiente fotografía es un buen caso de estudio.
El caso de (Mc)Conway Hart
Una de las fotos del álbum del Rijksmuseum muestra una calle descrita como “rota”.
No se ha identificado el autor, la fecha ni el lugar donde fue tomada esta fotografía. Se encuentra en la mitad del álbum, entre fotos tomadas en Chamonix, Francia y en Delhi, India. Al lado de la calle rota hay varios edificios, llamados Jewerllery James Browne, Mountains Hotel y Photostudio McConway Hart. Buscar estos nombres en internet no genera resultados útiles.
El estudio de fotografía podría darnos una pista sobre el posible autor (o autores) de esta imagen, pero buscar las combinaciones de McConway y Hart tampoco aportó resultados.
La iglesia que puede verse a lo lejos, justo en el centro del borde derecho de la fotografía, fue un buen punto de referencia para localizar dónde se tomó esta fotografía.
La torre es muy parecida a la iglesia de otra fotografía que se encuentra casi al final del álbum del Rijksmuseum. Esta segunda imagen ya se había identificado como la mezquita Tipu Sultan Shai en Calcuta, India.
Si comparamos ambas estructuras, vemos que podría tratarse de la misma torre.
Tanto la mezquita como la iglesia siguen existiendo en la actualidad. De modo que el ángulo de la fotografía antigua puede utilizarse para encontrar la “calle rota” en Google Maps. La calle se llama Sido Kanhu Dahar y lleva a un gran edificio que, antes de la independencia de India, estaba identificado como la Casa de Gobierno y donde ahora se aloja el gobernador de Bengala Oeste.
Ahora que hemos identificado la calle, ¿podemos descubrir más sobre el estudio de fotografía?
Una búsqueda de la calle por los nombres de los negocios no generó ningún resultado útil. Pero buscar la calle por sí sola nos llevó a una página de Wikipedia, la cual explica que Sido Kanhu Dahar antes se llamaba Esplanade Row East.
Un sondeo del nombre histórico de la calle junto con “Hart” y “fotografía” nos lleva a una página web sobre la historia de la fotografía que menciona a Conway Weston Hart, quien tenía un negocio en Esplanade Row 7, Calcuta.
Conway Weston Hart es un pintor retratista y fotógrafo australiano. Sus obras están en el Museo Getty de Los Ángeles, en Estados Unidos; el UK National Portrait Gallery en Londres y en el Australian National Portrait Gallery en Canberra, así como en el National Gallery of Victoria, también en Australia. Se habla más a profundidad del trabajo artístico de Conway Hart en la revista Australiana, la cual denota que su clientela “incluía a dignatarios, políticos, miembros de la rama judicial y sus esposas”. Según las páginas de subastas, uno de sus retratos pintados se vendió por alrededor de $125,000 dólares en 2016.
Pero ¿por qué parece que el cartel dice McConway Hart y no Conway Hart?
Se podría asumir que “MCCONWAY” es un apellido escosés con el prefijo Mc-, lo que complica búsquedas futuras. Es más probable que ‘MC’ se refiere a “Master Craftsman” (maestro artesano), un título que Conway podría haber ostentado al ser tanto fotógrafo como pintor. Es una de muchas abreviaciones y acrónimos para oficios y artesanías cuyo uso ha decaído, pero que aún pueden encontrarse en documentos históricos.
Según el sitio web de investigación Design & Art Australia Online, Hart salió de Australia en 1861 y viajó, junto con su esposa, a Calcuta para abrir ahí su estudio. Apenas tres años después de llegar a India, enfermó de cólera y falleció. Debido a que India fue una colonia, el obituario de Conway W. Hart puede encontrarse en The British Newspapers Archive en línea.
Conway tenía también hijos con edad para trabajar. Los periódicos digitalizados, registros de nacimiento y sitios de genealogía familiar como MyHeritage.com y Ancestry.com revelan que la pareja tuvo al menos tres hijos; el mayor tendría 15 años cuando murió su padre.
Sin embargo, no parece que el negocio de fotografía de Conway sobreviviera después de su muerte. Si buscamos la dirección de su negocio en los periódicos archivados, encontramos un anuncio de bienes raíces. Este –publicado el 22 de junio de 1865, más de un año después de la muerte de Conway– contiene la dirección de su local, que en esos momentos estaba siendo utilizado por una agencia de bienes raíces.
La imagen presentada más abajo, encontrada en la web Old Indian Photos, muestra que en 1865 la fachada del edificio había cambiado. Si nos acercamos y la comparamos con la fotografía original, podemos ver que en el edificio que solía albergar el negocio de fotografía de Conway Hart ahora se encuentra el local de “Madame Nielli”, una sombrerera francesa. Esto demuestra que, al menos desde 1865, su negocio había cerrado completamente o, al menos, ya no operaba en el mismo sitio.
El sitio web de genealogía MyHeritage.com le permite a los usuarios subir sus linajes familiares. La presencia de Conway Hart en este portal nos permitió encontrar a un familiar del pintor, que se había interesado en su historia familiar.
Una usuaria, Pamela Webster, había subido una fotografía de Conway Hart que no puede encontrarse en ningún otro sitio en línea.
Bellingcat contactó a Webster quien es la tataranieta de Conway Hart y, al igual que él, artista. Está trabajando en un libro sobre Conway para sus nietos y le alegró conocer la existencia de la fotografía de su estudio.
De vuelta a los archivos
Conforme los museos digitalizan sus colecciones, el arte se vuelve más accesible para los investigadores digitales.
Conectar los puntos es importante, ya que ayuda a establecer la ubicación, el periodo y el potencial autor no solo de las fotografías históricas sino de otros tipos de arte. También puede ayudar a corregir información que significó alguna complicación para hacer estas conexiones.
Por ejemplo, podemos demostrar que las fotografías atribuídas a Conway Hart no pueden haber sido tomadas en la década de 1870, aunque el National Portrait Gallery de Londres haya fechado una así.
El Museo Metropolitano de Nueva York también tiene una imagen de Esplanade Row de la década de 1850, tomada por un autor desconocido. La fotografía menciona el edificio del “Mountain Hotel”, aunque en realidad sea el “Mountains Hotel”. Además, no incluye el nombre de la calle, solo dice “Calcuta”.
Pero estas habilidades tienen otra aplicación de interés público: una mayor comprensión de cómo se pueden rastrear las imágenes en línea puede ayudar a investigar arte perdido o robado. El sitio web del FBI contiene fotografías de obras de arte que se cree que fueron robadas, al igual que el German Lost Art Foundation, que busca restituir las obras de arte saqueadas durante el nazismo.
En algunos casos, aún puede ser necesario visitar estos archivos. Aunque la investigación en línea no puede reemplazar por completo a la tradicional, el aumento de herramientas y métodos investigativos digitales puede ofrecer nuevas pistas sobre obras de arte y documentos que durante mucho tiempo han desconcertado tanto a investigadores como a artistas.
Este artículo se publicó en Bellingcat. Se reproduce aquí con autorización. Bellingcat es miembro de GIJN.
Recursos adicionales
Cuatro maneras de detectar imágenes falsas con tu teléfono
Cómo ayuda la arquitectura forense a los periodistas con técnicas de investigación complejas
10 lecciones sobre técnicas forenses digitales de Logan Williams, científico de datos de Bellingcat
Foeke Postma trabaja como investigador e instructor en Bellingcat. Tiene formación en análisis y resolución de conflictos y está interesado en temas militares, ambientales y LGBT+.