Asegurarte de la veracidad de tus historias requiere mucho más que conseguir datos correctos. Exige un enfoque meticuloso desde el inicio, al igual que pasar un control de calidad.
A continuación, encontrarás un sistema con tres puntos de control que ha sido desarrollado desde 2004 por nuestra sala de redacción en Uppdrag Granskning (Mission Investigate), el programa de televisión de investigación de SVT, la emisora pública nacional de Suecia.
A lo largo de los años, Mission Investigate (Misión Investiga) ha producido historias premiadas internacionalmente sobre temas que van desde el soborno transnacional y el crimen organizado, hasta la iglesia católica y la ONU. A lo largo del camino, nuestro equipo ha aprendido cómo evitar conseguir datos incorrectos y cómo asegurarse de que nuestras historias sean cuestionadas antes de su publicación, no después.
Esperamos los siguientes puntos sean de tu utilidad.
Los tres puntos de control
¿Por qué puntos de control? Puede parecer innecesariamente burocrático, pero si no se formaliza el proceso, existe un riesgo significativo de que queden partes necesarias del trabajo sin hacer. Tomando en cuenta lo que está en juego, el esfuerzo está más que justificado. El tiempo total empleado (un par de reuniones de una hora y una sesión de verificación de datos de hasta un día) no debería desanimar a ninguna sala de redacción pequeña, periodista de investigación o freelancer: la recompensa será la tranquilidad a medida que se acerque la publicación.
Primer punto de control: la reunión inicial
Después de la investigación previa sobre la idea de la historia, el reportero está listo para ser desafiado: la hipótesis, aquello que necesita ser investigado y el por qué, ¿se mantiene? ¿Qué se dice en contra de la hipótesis? Esta es la pregunta central en la reunión de puesta en marcha, donde se decide si vale la pena invertir en el proyecto.
Dado que los reporteros tienden a descuidar los aspectos problemáticos, existe la necesidad de proporcionar un contrapeso con puntos de vista opuestos, también conocido como jugar al abogado del diablo. Puede ser un editor o un reportero dispuesto a desafiar a sus colegas. Esta persona, que debe estar bien preparada, será una parte crucial del proceso de control de calidad de principio a fin.
Este tipo de cuestionamiento crítico puede generar momentos tensos, pero al final, todos entienden que se hace con las mejores intenciones.
La toma de responsabilidad es un elemento esencial en la lista de verificación de la reunión. Se elabora un plan sobre cómo y cuándo contactar al sujeto de la investigación. Para nosotros, la regla general es hacer esto lo antes posible. Una razón para esto es asegurarse de que tienes una historia y la otra es la imparcialidad. Hay excepciones, por supuesto, como en países represivos en los que es posible que debas esperar hasta justo antes de la publicación.
Segundo punto de control: la reunión del punto medio
Con al menos un primer borrador listo, el propósito de esta reunión es discutir acerca de la calidad. Todavía hay tiempo para cambios importantes.
Pregunta lo siguiente:
- Conclusiones: ¿se ha probado la hipótesis o es necesario un ajuste? ¿Se pueden cuestionar o refutar los hallazgos de alguna manera? ¿Pueden excluirse todas las demás explicaciones?
- La toma de responsabilidad: ¿somos lo más justos posible? ¿Existen circunstancias atenuantes?
- Panorama general: ¿falta algo o algo se siente fuera de lugar? ¿Retratamos las cosas demasiado en blanco y negro?
Puedes reportar hechos verdaderos sin decir la verdad. Desafortunadamente, los reporteros a menudo muestran un sesgo de confirmación al favorecer la información que confirma la historia e ignora los datos contradictorios. El resultado puede ser una ausencia de hechos críticamente relevantes y una investigación seriamente engañosa.
Solo el periodista tiene una visión completa de la selección de datos. Las siguientes preguntas requieren respuestas honestas y deben hacerse repetidamente durante el proceso de narración:
- ¿Otros hechos cambiarían el panorama general?
- ¿El público se sentiría decepcionado si supiera lo que hemos omitido?
- ¿Podemos justificar la selección sin perder credibilidad?
Finalmente, estos son otros dos elementos para tomar en cuenta:
- Fuentes: ¿son confiables? ¿Estamos haciendo las preguntas críticas y relevantes? ¿Hemos realizado las verificaciones de antecedentes necesarias?
- Expertos: ¿son representativos? ¿Nos hemos asegurado de que el experto del que dependemos esté actualizado y sea de confianza?
Tercer punto de control: verificación de los hechos
Antes de hacer una verificación de hechos línea por línea, necesitamos tener una respuesta a las acusaciones del sujeto de la investigación. Esta persona generalmente sabe más sobre el caso de las irregularidades que cualquier otra persona (incluido el reportero).
Incluso si estás dando malas noticias, tú y el sujeto de la investigación pueden tener al menos una cosa en común: los hechos deben ser correctos si se van a publicar. Incluso si las personas involucradas en tu investigación se niegan a darte una entrevista, cuando te comunicas con ellos, es una buena oportunidad para permitirles responder a los datos.
Requiere franqueza de tu parte brindarle al sujeto de la investigación información detallada sobre las acusaciones. En algunos casos, tal vez incluso sea necesario informarles sobre la redacción de la historia. Pero nunca reveles detalles que puedan conducir a fuentes.
Además de verificar los hechos con el «verdadero experto», el sujeto de la historia, existen otros beneficios: tendrás tiempo para examinar las explicaciones y, con suerte, obtendrás nueva información para llenar los vacíos de la historia. Y ciertamente es preferible obtener una reacción antes que después de la publicación.
Por supuesto, hay muchos casos en los que no se puede utilizar este método. Al tratar con grupos violentos o gobiernos autoritarios, por ejemplo, se exige otro enfoque, como se describe en el artículo de GIJN: Consejos para no recibir una carta sorpresa. Sin embargo, tratar con personas peligrosas no reduce la necesidad de ser precisos y justos. Por el contrario, puede ser incluso más crítico.
Ahora al proceso línea por línea.
El principio es simple. Cada pieza de información verificable en la historia debe rastrearse hasta una fuente. Esta verificación de hechos debe realizarse con suficiente tiempo antes de la publicación, colocando al exigente abogado del diablo en un papel central.
Para que el proceso sea eficaz, los documentos de investigación deben estar fácilmente disponibles. Las notas a pie de página con enlaces al final de cada hoja o sección del guión facilitan el seguimiento de los documentos.
La verificación de datos exige una atención total, pero puede ser difícil mantenerse alerta durante un día largo. Por lo tanto, es aconsejable comenzar con los aspectos centrales y más complicados. Siempre hay algo en la historia que se puede cuestionar. Por lo tanto, debes concentrarte en los asuntos esenciales antes de dejarte llevar por los detalles.
No olvides preguntar: ¿todas las conclusiones están bien fundamentadas? Puede que deban afilarse o, por el contrario, suavizarse.
Si la historia es compleja, el reportero debe entregar el material de investigación antes de que comience la verificación de datos con una explicación de cómo se llegó a la conclusión. A veces, esto puede resultar más fácil de decir que de hacer. Por ejemplo, los hallazgos podrían basarse en documentos de investigación complejos, como grandes conjuntos de datos o cifras de informes financieros.
En tales casos, podría ser necesaria una sesión preliminar, línea por línea, tal vez con un experto invitado. Si es necesario, podría ser posible obtener ayuda externa pro bono para verificar los datos o revisar la metodología.
Preguntas adicionales que deben responderse:
- ¿La historia es justa y aborda contraargumentos?
- ¿Tienes una respuesta a todas las acusaciones relevantes? Puede que sea necesario comprobar la transcripción completa de la entrevista.
- ¿Son necesarios todos los detalles negativos sobre el tema de la investigación? ¿Estás abierto a las circunstancias atenuantes relevantes?
Al hacer la edición línea por línea, es esencial verificar todos los hechos, incluso los aparentemente inofensivos. El más mínimo error puede ser utilizado por quiénes quieran desacreditarte. Decir «sé que es verdad» no justifica una excepción.
Finalmente, vuelve a verificar los nombres, títulos, fechas, cifras y todo lo que pueda ser verificado. Eso incluye citas: si un entrevistado se equivoca, debes saberlo.
10 consejos para verificar datos
- Usa documentos originales: cuando es posible obtener documentos de primera mano, no se debe aceptar nada más.
- Verifica antes de citar: no dependas de hechos publicados por otros medios, sin importar cuán creíbles parezcan.
- Sé preciso con los números: mantente alejado de la tentación de exagerar. Por ejemplo, si 12 personas se ven afectadas, debes informar ese número (un hecho) en lugar de indicar «muchos» (una estimación vaga).
- Mantente alejado de las víctimas: no importa cuánto creas en las víctimas, no tomes lo que dicen como un hecho a menos que pueda ser verificado. Por ejemplo, compara «no recuerda nada» (difícil de verificar) con «dice que no recuerda nada» (su afirmación es un hecho).
- Evita los juicios de valor difíciles de comprobar: llevar las conclusiones un paso más allá puede crear problemas innecesarios. Por ejemplo, si concluyes que el empleador «ignoró las reglas de seguridad», debes demostrar que lo hizo deliberadamente. Pero, por otro lado, decir que el empleador «no siguió las reglas de seguridad» es relatar un hecho.
- Sé transparente con las limitaciones: sé abierto al público con respecto a lo que desconoces. Ten cuidado con la tentación de insinuar algo que no puedes probar. La transparencia fortalece tu credibilidad, sobre todo cuando eres abierto sobre las limitaciones.
- Omite los detalles de identificación: los gráficos, las fotos y el material de video deben estar despojados de información privada innecesaria: nombres y otros detalles en documentos, placas de matrícula, números de calles y nombres en buzones.
- Realiza un análisis cuadro por cuadro: las fotos a menudo son pasadas por alto en la verificación de datos, ya que no están en el guión ni en el texto. Sin embargo, Google Images, Facebook y otras plataformas hacen que sea sencillo buscar imágenes, a veces demasiado sencillo. Cuando sea necesario, verifica el origen, utilizando la búsqueda inversa de imágenes y otras herramientas. (Para obtener más información sobre este tema, lee «Cuatro formas rápidas de verificar imágenes» de GIJN).
- Termina con una autoevaluación: ¿Aún quedan dudas? ¡Esta es la última oportunidad de hacerlo!
- Asegúrate de que se implementen los cambios: todos los cambios en el guión o el texto, como la ortografía corregida de los nombres, deben aplicarse a los gráficos y otras partes de la publicación. Por tanto, es necesaria una rutina de seguimiento.
Este proceso inevitablemente revelará errores que podrían haber dañado seriamente la credibilidad de la historia y a ti mismo como reportero de investigación. Y aún más importante: podría haber provocado un daño injustificado al sujeto de la investigación.
Al realizar la edición línea por línea, obtendrás una recompensa inmediata, ya que no te despertarás en medio de la noche con sudor frío, preocupado por los errores fácticos. En cambio, podrás dormir bien, sabiendo que has hecho todo lo posible para minimizar el riesgo de equivocarte.
Nils Hanson es un editor de investigación independiente galardonado. Durante 14 años fue productor ejecutivo de Mission Investigate. Tiene más de 30 años de experiencia y ha cubierto alrededor de 500 investigaciones. Durante los dos últimos años de su liderazgo, el programa ganó diez premios internacionales. Su guía sobre periodismo de investigación es de lectura obligatoria en Suecia.